Es una enfermedad infecciosa transmitida por la picadura del flebótomo o mosquito simúlido hembra.
La leishmaniasis es causada por un parásito diminuto de nombre protozoo leishmania. Los protozoos son organismos compuestos de una sola célula.
Existen diferentes formas de leishmaniasis:
- La leishmaniasis cutánea afecta la piel y las membranas mucosas. Las llagas en la piel por lo regular comienzan en el sitio de la picadura del flebótomo. En algunas personas, se pueden desarrollar llagas en las membranas mucosas.
- La leishmaniasis sistémica o visceral afecta el cuerpo entero. Esta forma ocurre de 2 a 8 meses después de que la persona es picada por el flebótomo. La mayoría de las personas no recuerdan haber tenido una llaga en la piel. Esta forma puede llevar a complicaciones mortales. Los parásitos dañan al sistema inmunitario disminuyendo la cantidad de células que combaten enfermedades.
Se ha informado de casos de leishmaniasis en todos los continentes, a excepción de Australia y la Antártida. En los países de América, la enfermedad puede encontrarse en México y Suramérica. Se han reportado casos de leishmaniasis en el personal militar que regresó del Golfo Pérsico.
Los síntomas de la leishmaniasis cutánea dependen de dónde están localizadas las lesiones y pueden incluir:
- Dificultad para respirar
- Llagas en la piel que pueden convertirse en una úlcera cutánea que sana muy lentamente
- Congestión, goteo y hemorragia nasal
- Dificultad para deglutir
- Úlceras y desgaste (erosión) en la boca, la lengua, las encías, los labios, la nariz y el tabique nasal
En los niños, la infección visceral sistémica empieza generalmente de una manera súbita con:
Los adultos por lo general presentan una fiebre que dura de 2 semanas a 2 meses, acompañada de síntomas como fatiga, debilidad e inapetencia. La debilidad aumenta a medida que la enfermedad empeora.
Otros síntomas de la leishmaniasis visceral sistémica pueden incluir:
- Molestia abdominal
- Fiebre que dura semanas (puede aparecer y desaparecer en ciclos)
- Sudores fríos
- Piel escamosa, grisácea, oscura y pálida
- Adelgazamiento del cabello
- Pérdida de peso
Su proveedor de atención médica lo examinará y puede descubrir que su bazo, su hígado y sus ganglios linfáticos están agrandados. Le preguntarán si recuerda haber sido picado por flebótomos, o si ha visitado un área en la que la leishmaniasis es común.
Los exámenes que se pueden hacer para diagnosticar la afección incluyen:
- Biopsia y cultivo del bazo
- Cultivo y biopsia de médula ósea
- Prueba de aglutinación directa
- Prueba indirecta de anticuerpos inmunofluorescentes
- Prueba de PCR específica para Leishmania
- Cultivo y biopsia del hígado
- Cultivo y biopsia de ganglios linfáticos
- Prueba cutánea de Montenegro (no aprobada en los Estados Unidos)
- Cultivo y biopsia de piel
Otros exámenes que se pueden realizar incluyen:
- Conteo sanguíneo completo
- Pruebas serológicas
- Albúmina en suero
- Niveles de inmunoglobulina en suero
- Proteína en suero
Los principales medicamentos utilizados para tratar la leishmaniasis son los compuestos que contienen antimonio. Estos incluyen:
- Antimoniato de meglumina
- Estibogluconato de sodio
Otros fármacos que se pueden utilizar incluyen:
- Anfotericina B
- Ketoconazol
- Miltefosina
- Paromomicina
- Pentamidina
Puede necesitarse una cirugía plástica para corregir la desfiguración causada por las llagas en la cara (leishmaniasis cutánea).
Las tasas de curación son altas con los medicamentos apropiados, en especial cuando el tratamiento se inicia antes de que el sistema inmunitario resulte dañado. La leishmaniasis cutánea puede llevar a la desfiguración.
La muerte por lo regular es causada por complicaciones, como otras infecciones, y no por la enfermedad en sí. A menudo, ocurre en un período de 2 años.
La leishmaniasis puede causar lo siguiente:
- Sangrado (hemorragia)
- Infecciones mortales debido a daño en el sistema inmunitario
- Desfiguración facial
Comuníquese con su proveedor de atención si tiene síntomas de leishmaniasis después de haber visitado un área en donde se sabe que se presenta la enfermedad.
Tomar medidas para evitar las picaduras de los mosquitos simúlidos o flebótomos puede ayudar a prevenir la leishmaniasis:
- Coloque toldillos de malla fina alrededor de las camas (en áreas donde se presenta la enfermedad)
- Ponga mallas en las ventanas
- Use repelentes de insectos
- Use ropa protectora
Las medidas de salud pública para reducir los flebótomos son importantes. No existen vacunas ni medicamentos que prevengan la leishmaniasis.