viernes, 4 de mayo de 2018

Enfermedades debidas a temperaturas extremas (insolación, congelación).

¿Qué hago si mi hijo es expuesto a temperaturas extremas?

Si su hijo está expuesto a temperaturas extremas, usualmente por un período de tiempo prolongado y sin ropa apropiada ni otra protección podría estar en una situación de vida o muerte.

Hipotermia

La hipotermia se desarrolla cuando la temperatura de un niño baja por debajo de lo normal debido a la exposición al frío. La hipotermia suele ocurrir cuando un niño está jugando afuera en un clima extremadamente frío sin tener puesta ropa apropiada. A medida que la hipotermia comienza, el niño puede temblar y volverse letárgico y torpe; hablar de forma poco clara y la temperatura del cuerpo disminuye.
Qué hacer: Llame al 911 de inmediato. Hasta que llegue la ayuda, lleve al niño a un lugar cerrado, quítele cualquier ropa mojada que tenga y envuélvalo en frazadas o ropa cálida. Si la respiración o el pulso se detienen, necesitará resucitación boca a boca o reanimación cardiopulmonar.

Congelación

La congelación ocurre cuando la piel y los tejidos externos se congelan. La congelación tiende a ocurrir en las extremidades como los dedos de las manos y los pies, las orejas, y la nariz, los cuales pueden volverse pálidos, grises y ampollados. Al mismo tiempo, es probable que el niño se queje de que la piel le arde o está adormecida.
Qué hacer: Lleve al niño a un lugar cerrado, donde debe colocar las partes congeladas de su cuerpo en agua tibia (no caliente); puede colocar paños tibios en la nariz, orejas y labios congelados. No frote las áreas congeladas. Después de unos minutos, séquelo y cúbralo con ropa o frazadas. Dele algo tibio para beber. Si el adormecimiento continúa por más de unos minutos, llame al médico.

Insolación

La insolación puede ocurrir cuando un niño se sobrefatiga en clima muy caluroso y se deshidrata. Los mecanismos en el cerebro que controlan la temperatura corporal pueden dejar de funcionar, y puede desarrollar una fiebre de 105 grados Fahrenheit (40,4 Celsius) o más. Su piel estará caliente, seca (sin perspirar) y roja. Posiblemente se sienta mareado y con náusea, y puede experimentar calambres estomacales y respiración agitada.
Qué hacer: Retire al niño del sol y llame al número de emergencia (911) de inmediato. Quítele la ropa y métalo en una tina del baño templada (no fría). Para ayudar a restaurar la circulación, masajee sus brazos, piernas y otras partes del cuerpo.
Es importante que su hijo siempre aumente la cantidad de líquidos que bebe en climas calurosos, especialmente cuando hace ejercicio. Exhórtelo a que beba líquidos disponibles de forma regular. Cuando participe en deportes organizados en los meses de verano, debe ponerse muy poca ropa y holgada.